La casa, que se sitúa en una zona de nueva urbanización, tiene un objetivo prioritario; la búsqueda de la privacidad e intimidad. Resultado de esta decisión común entre cliente y estudio, la vivienda se organiza a través de una serie de patios que se sitúan estrategicamente y permiten establecer un filtro entre el exterior y las estancias interiores.. Conscientes de esta decisión, el aspecto exterior de la vivienda es el resultado de establecer unos limites definidos.
La parcela, con un desnivel de 3 metros, se resuelve en su parte superior (al sur) a través de un patio inglés que permite la ventilación y la entrada de luz natural a la planta baja. La resolución del programa y la materialidad tienen una influencia directa: las casas patio mediterránea.
Influencia que, como se comentaba, se deja ver en su fachadas encaladas y en el tratamiento de los huecos.
En sección una sucesión de patios a diferente cota posibilita la entrada de luz natural a todas las partes de la vivienda, tamizandola y conduciéndola al mismo tiempo que permite traspasar el aire de un punto a otro del inmueble.
Esta se presenta en el proyecto como una nueva cualidad donde la transición entre norte y sur permiten que los vientos dominantes o la luz solar atraviesen las diferentes estancias y climaticen el hogar.
Resulta pues, un espacio abierto fluido y flexible donde el control de los agentes climáticos y la preocupación por la intimidad y la vistas se convierte en actores principales de este proyecto.